Un tema que me preocupa mucho, es que todavía sigo escuchando a muchos profesionales del marketing refiriéndose al “target” de sus productos como una cuestión demográfica. A la pregunta de ¿quién es tu cliente? Suelen haber 2 tipos de respuesta:
- Nuestro producto va dirigido a todo el mundo.
- Hombres y mujeres de 20 a 50 años, con estudios universitarios y con un nivel socio-económico medio-medio-alto.
La verdad es que dudo mucho, que incluso en el pasado este tipo de segmentación fuese realmente útil a la hora de abordar a un público objetivo, pero está claro que en la era de internet y el big data, donde conocer prácticamente absolutamente todos los detalles de una persona es posible, utilizar solamente ese tipo de segmentación es algo completamente inútil. ¿Cómo puedes conversar y generar una relación con un perfil de cliente “Mujer de 25 años” y un “hombre de 50 años” a la vez?
Pensemos por un momento como es nuestra generación actual, somos la cultura “mobile”, el “Do it yourself”, “be an entrepreneur”, “selfie culture” etc etc… Para abordar a esta nueva realidad de clientes, tenemos que ser capaces de conocerles y entenderles, para así hacer un marketing acorde a nuestra generación. Es muy importante que nuestras acciones de marketing pertenezcan al año 2015, y no sean un reflejo del hábito que nuestra empresa lleva haciendo los últimos tropecientos años.
En Hydra Social Media, creemos que el punto de partida para tener éxito en cualquier acción de marketing es el cliente. Por eso creemos que en el “Target Design”, que no es más que pasar de un proceso de trabajo demográfico a uno más bien de tipo etnográfico. No nos interesan las generalidades. Nos interesa conocer a las personas que están detrás de la masa. ¿Cómo son exactamente? ¿Qué piensan? ¿Qué les preocupa? ¿Qué desean y aspiran? Etc… Etc… Existen muchas nuevas herramientas que provienen del mundo de la innovación que resultan tremendamente útiles para dar respuesta a estas necesidades que tenemos las empresas hoy para conocer a nuestros clientes.
Algunos ejemplos de estas herramientas son:
Persona Canvas: lo que busca este canvas es pasar de los socio-demográfico a la persona. ¿Quién está detrás de la masa?
Empathy Map: esta herramienta nos permite ponernos en los zapatos del cliente, y ver el mundo a través de sus ojos.
Customer Journey Map: con este canvas podemos definir el ciclo de la experiencia de nuestro cliente, todos los “touch points” que tenemos a lo largo de nuestra relación, y definimos cómo se siente en cada momento, en dónde suceden esos momentos de contacto y cómo aportamos valor al cliente en cada momento.
Seguramente tu empresa y tú estéis en esa lucha eterna de buscar nuevas formas de aportar un valor diferencial a vuestros clientes para conseguir ganar la pelea a vuestros competidores.
Mi mejor consejo hoy, es que tu punto de partida para definir tu estrategia de propuesta de valor, siempre empiece por conocer en profundidad a tu cliente. A la persona que te diriges.
Una vez más me gustaría agradecer tu tiempo dedicado a esta lectura. Espero que estas líneas te hayan reportado algún beneficio. Por favor, si te ha resultado interesante este contenido, te invito a que lo compartas porque «compartir es amar»…. 😉
¿Qué herramientas usas en tu empresa para conocer a las personas que compran tus productos?